De las primeras recetas que recuerdo haber cocinado con mi madre, son las Magdalenas. Ahora, mientras escribo, me viene a la mente como olía la cocina después de hacerlas!
Luego vinieron los bizcochos, las pizzas, las quiches...
Pero el gusto de preparar madalenas y llevarlas al día siguiente al cole, era lo más!
Hace un tiempo preparé estas Magdalenas de nata y como salieron tan buenas, tiernas, aromáticas...las volví a repetir para una cena con amigos y tomar con el café.
Para que queden mini mini...utilicé unos moldes de silicona, de los que se usan para hacer trufas o bombones, pero podéis utilizar el molde que os vaya mejor.
Son del tamaño "bocado"...así que hay que controlarse porque no te das cuenta y te comes tres o cuatro en un momento!
He pensado que estos días que hace frío, os apetecería hornear unas cuantas...espero que os gusten!!!
Ingredientes
350 gr. de harina
250 gr. de azúcar
250 ml. de girasol
100 ml. de nata para montar (pero no hay que montarla)
1 sobre de levadura royal
4 huevos
La ralladura de 1 limón.
250 gr. de azúcar
250 ml. de girasol
100 ml. de nata para montar (pero no hay que montarla)
1 sobre de levadura royal
4 huevos
La ralladura de 1 limón.
Preparación en Thermomix
Vertemos la harina y la levadura en el vaso y tamizamos, programando 30 segundos velocidad 3. Retiramos y reservamos.
Ponemos la mariposa en las cuchillas y echamos los huevos y el azúcar. Programamos 7 minutos, temperatura 37º y vel. 3. Agregamos la ralladura de limón (sólo la parte amarilla ya que la blanca nos amargaría) y quitamos la temperatura; programamos otros 6 minutos, vel. 3.
Añadimos la nata y el aceite y programamos 3 minutos más a vel. 2. Quitamos la mariposa
Añadimos la harina y la levadura reservadas y mezclamos con la espátula hasta que quede casi todo bien mezclado. A continuación, programamos 5 segundos, vel. 6, y después volvemos a mezclar con la espátula manual.
Dejamos reposar en el vaso 10 minutos antes de llenar las cápsulas.
Preparación tradicional:
Tamizamos la harina y la levadura con la ayuda de un colador. No es imprescindible, pero la masa queda más esponjosa. Reservamos.
Ponemos los huevos y el azúcar en un bol y batimos con ayuda de una batidora eléctrica, al menos durante 2 minutos.
Agregamos la ralladura de limón (sólo la parte amarilla ya que la blanca nos amargaría) y mezclamos de nuevo, en este caso a mano, con ayuda de una espátula.
Añadimos la nata (semi-montada) y el aceite y volvemos a mezclar con la ayuda de la espátula.
Añadimos la harina y la levadura reservadas y mezclamos de nuevo con la ayuda de la espátula hasta que quede todo bien integrado, sin que se vea nada de harina.
Dejamos reposar en el bol unos 10 minutos antes de llenar las cápsulas.
Para ambos casos:
Repartimos la masa en moldes de papel, llenando hasta 3/4 de su capacidad.
Espolvoreamos por encima con azúcar y dejamos reposar al menos una hora. Yo las dejé unas tres horas a temperatura ambiente y luego las horneé.
Introducimos las magdalenas en el horno pre-calentado a temperatura 210º. Horneamos durante unos 10-12 minutos hasta que estén doraditas.
NOTA
Cuanto más tiempo las dejemos reposar antes de hornear, más esponjosas nos quedarán.
Le podéis añadir gotas de chocolate o trocitos de fruta escarchada.